La música para los niños: un estudio de los científicos
Si mira a su alrededor, verá que la música está en todas partes. Es una parte integral de nuestra vida cotidiana. No importa la edad que tengamos, si somos jóvenes o mayores, ¡escuchamos música diferente todo el día!
Oímos música en todas partes: en las televisiones, en las películas, en las redes sociales, en los reproductores, en los teléfonos, en la calle... Casi todo tipo de ceremonias gubernamentales van acompañadas de una banda de música o una orquesta, o de alguna otra música. Cantamos canciones y tocamos música en ocasiones festivas: cumpleaños, bodas, aniversarios...
Tenemos música para adorar a Dios.
Niños
Es difícil encontrar un niño al que no le guste escuchar música y cantar al ritmo de la misma. Las investigaciones han demostrado que cuando los padres crean un entorno rico en música para sus hijos, no sólo los entretienen, sino que les ayudan a desarrollar habilidades esenciales para la vida. Por eso no es de extrañar que muchos padres utilicen la música para ayudar a sus hijos a expresar sus emociones, como la alegría, la pena o la emoción. Es un tipo de desahogo para cualquier persona, no sólo para los niños.
¿Qué tipo de música tiene el poder de enseñar?
En los años 90, un grupo de investigadores realizó un estudio que demostró exactamente cómo afecta la música a un niño (si la escucha desde una edad temprana). La música ayuda a los niños a hablar con claridad, a desarrollar su vocabulario, a reforzar sus habilidades emocionales y a mejorar su comportamiento social.
De hecho, la música tiene el poder de reforzar la conexión entre el cuerpo y el cerebro. Por ejemplo, bailar al ritmo de la música ayuda a los niños a desarrollar sus habilidades motoras. Cantar ayuda a desarrollar la voz. La música también ayuda a trabajar en equipo y a aprender habilidades sociales esenciales.
El psicólogo Howard Gardner sobre la música
Howard Gardner publicó hace décadas su famosa teoría de la inteligencia múltiple, que sigue evolucionando. En esta teoría, identificó siete formas diferentes en las que las personas pueden aprender:
- Verbal y lingüística
- Con la ayuda de la matemática lógica
- Visual-espacial
- Kinaesthetic
- Intrapersonal
- Interpersonal
- Musical y rítmico
Más tarde añadió otras dos nuevas formas de aprendizaje: "naturalista" y "espiritual".
La inteligencia musical es la capacidad de aprender cosas en un estilo rítmico.
Howard Gardner también destacó a varios artistas y mentes creativas famosas y célebres, como Stravinsky y Picasso. Estos son ejemplos de personas que estudiaron bien y fueron capaces de lograr lo imposible. Resulta que para ellos, la información se absorbe mejor en forma de patrones (elementos repetitivos).
Según Gardner, los niños o adultos que han desarrollado la inteligencia musical se sienten más atraídos por la música y la poesía. Pueden aprender mejor si la información está sistematizada y presentada musicalmente. El ejemplo más sencillo, que todo el mundo recuerda, es la melodía con la que memorizamos el alfabeto, es decir, el libro de cuentas. Tenga en cuenta que todos los idiomas tienen una melodía separada específicamente para el alfabeto.
Los científicos han concluido...
- Los niños de la primera infancia no responden ni expresan la música de la misma manera que los adultos.
- Los primeros años de la vida de un niño son los más importantes para desarrollar el amor por la música.
Impacto en los niños
Los niños reaccionan a la música del mismo modo que a las palabras. Incluso los niños más pequeños tratan de distinguir los tonos de la música, la frecuencia y el ritmo, al igual que cuando escuchan una palabra por primera vez. Por eso los primeros años son tan importantes para el desarrollo del niño.
Construyen su propia estructura organizativa en el cerebro y desmontan las diferentes partes de la música para poder analizarla después. Esto desarrolla sus habilidades cognitivas y funciones cerebrales.
Es importante tener en cuenta que los niños aprenden las habilidades musicales imitando y memorizando ritmos y tonos. Si no aplauden o hacen algún otro movimiento, no podrán desarrollar sus habilidades musicales.
Una de las cosas que tiene un efecto más negativo en los niños es cuando los padres no se inclinan por la música y no apoyan el amor de los niños por ella.
El papel de los padres
Tanto si hablamos de educación musical como de cualquier otro tipo de educación, los padres desempeñan el papel más importante en la vida de un niño. Las escuelas y los profesores señalan universalmente el hecho de que los niños cuyas familias están más inclinadas hacia la música tienen mejores habilidades y comportamiento.
Los investigadores afirman que los niños que están expuestos a la música a una edad temprana en sus hogares tienen un vínculo más fuerte con sus padres. Así, la música no sólo es una herramienta que ayuda a los niños a maximizar su potencial, sino también un método de vinculación con sus familias.
Conclusión
Seamos realistas. No hay ningún inconveniente en dejar que tu hijo juegue o escuche música. Tiene un efecto positivo en ellos de muchas maneras: les ayuda a ser mejores estudiantes, mejores ciudadanos y mejores personas, y les ayuda a entender mejor el mundo y a comunicarse más con sus seres queridos y familiares. La música también tiene un efecto tranquilizador en los niños.